martes, 1 de noviembre de 2011

¿Por qué canto fado?

Una cuestión que hay que responder a aquellas personas interesadas por la labor que haces, es por qué una chica catalana canta fado... "Fado a la catalana" me han dicho alguna vez...

A menudo me han preguntado por aquello con lo que me siento identificada y también, qué similitudes  podríamos encontrar entre el espíritu portugués y el espíritu propio del fado con el espíritu catalán...

Es difícil de definir, ya que los motivos del corazón hay que ir muy a fondo a buscarlos... y está claro que cantar fado es, entre muchas otras cosas, un motivo del corazón.

En mi opinión, uno de los aspectos que más claramente aparecen, es que se trata de dos territorios, países, naciones, (decidlo como queráis) de tránsito, de comercio, de intercambio... el mar tiene un papel muy importante y ha facilitado el despertar de formas de expresión culturales bastante peculiares. La interculturalidad, el mar, el intercambio son hechos básicos en su evolución.





Quizá derivado de esta sensibilidad, encontramos una forma particular de sentir: la "saudade", la añoranza, la añoranza del que se tiene que marchar, otras  veces  huir, a tierras que se intuyen lejanas, la añoranza por los que ven marchar los seres queridos, la añoranza que genera el propio cambio constante, a veces difícil de asimilar, tan propio de las tierras que son de paso...

Es curioso que a inicios del siglo XX, momento de renacimiento cultural tanto en Cataluña como en Portugal, mientras en Portugal autores como Pessoa o Pascoaes hablaban del "saudosismo" como corriente que describía el sentimiento nacional, en Cataluña, otros… (Ribera y Rovira, Maragall...) hablaban del "enyorantisme" como corriente paralela surgida de las semejanzas entre dos pueblos... hermandad de los pueblos de los dos mares...

REFERENCIA:

Hay un libro muy interesante que recoge en su introducción información sobre lo citado y da muchas referencias de otros libros y autores. Para aquellos que quieran profundizar, claro: “Fernando Pessoa: escrits sobre Catalunya i Ibèria” Edició i traducció de Víctor Martínez-Gil. L’avenç 2007.

¿Quizás es por eso que esta catalana que os escribe canta fado? Quizás sí... quizás hay una parte "de inconsciente colectivo", tal vez es cierto que la tierra que nos cría deja una huella fuerte en nosotros.

Leyendo un artículo (inter-fado) que reflexiona sobre lo que el fado tiene para poder ser considerado universal, pensaba en cómo se reproducía esto en mí, aquí y ahora.

VER:


Un aspecto que me parece interesante y que me ha permitido avanzar en el discurso es el hecho de que, más allá de las semejanzas histórico-culturales con el país vecino, todo lo que el fado tiene de universal y que, como dice A. Brech, lo universal preservado por el fado, se puede retomar de nuevo para "reinventarlo", "personalizarlo", "redibujar-lo" ...

El fado, en mi opinión, no tiene sólo una cara: la portuguesa, la de la añoranza, la de la pasión... tiene muchas caras y guarda muchos secretos que cada territorio, cada persona, cada sensibilidad puede recuperar para convertirla en algo nuevo, diferente.

Es eso lo que nos legitima a todos los cantantes y músicos no portugueses a expresar el fado. Un fado abierto, nuevo, a nuestra manera.

Creo que nuevas influencias, nuevas tendencias y formas de entenderlo pueden enriquecerlo mucho y también preservarlo.

Por más que nos resistimos a la diversidad (tanto que nos cuesta aceptar a las personas recién llegadas a veces), es en esta donde se gesta lo mejor de cada pueblo... y para muestra sólo hace falta que escuchéis un buen fado antiguo y ya me contareis...

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